Clásicos del rock, en directo, este viernes

Hoy, lunes, día en que el país se la juega en los mercados internacionales (no ha sido suficiente con el triunfo electoral en Grecia de los conservadores pro-UE/Merkel, nada les parece suficiente a los «tiburones»), a ver si al menos el fútbol nos da la alegría que en economía se resiste ya varios años a darnos. Crucemos los dedos, pues, pero como nosotros, en nuestra mismidad estupefacta, apenas podemos hacer nada por remediar tan monumental desastre, hablemos de nuestro pequeño mundo que, aun plagado de marroncillos, siempre resultará más acogedor y entrañable que el árido y ventoso desierto en que se debaten las primas de riesgo que vuelan cada vez más alto, los eurobonos que no llegan, el Ibex que tocará suelo enseguida y la madre que los fundó a todos; que si es Alemania, menuda madre de los h., vamos….

El pasado viernes, John Bolduan, aquí le vemos un par de minutos grabados en mi iPhone

dio un buen recital con su guitarra acústica, haciendo repertorio propio de su disco (que vendió bastante bien entre los presentes, al terminar el recital) y versiones muy bien elegidas, moviéndose sin prejuicios por el folk, el swing, el gospel, el rock, el country… La pena es que hizo bastante calor y que siempre hay alguien del público que habla alto demasiado cerca del escenario, que ese es el problema; si la charla se produce un poco más lejos del artista no pasaría nada, hay sitio para todos; no sé como resolver esto, pero algo haremos y sin molestar nadie, estad seguros; el artista y su música son lo primero, que para eso viene al local, a que se le vea y se le escuche; pero a los clientes hay que mimarles, también, ¿no?. El concierto ocupa hora y media a la semana (menos del 1,5% del tiempo en que está abierto el local), da bastante curre en montaje y promoción, y constituye un modesto privilegio que hay que saber valorar; y un trabajo, el del artista, que debemos respetar. Suena solemne y un poco serio; pero es que es verdad, amigos.

Esta noche, Eurocopa, y como juega España en pantalla gigante en La Estación, habrá sonido de la retrasmisión; y no música, como ocurre cuando no juegan los nuestros, y, pro cierto, queda dpm, ayer por ejemplo, viendo ganar a Portugal escuchando a Lou Barlow, Jannelle Monnae, Four Tet, Giant Sand o American Music Club. Gozada, je.

A ver si vencemos esta tarde-noche y pasamos sin apuros y con buen juego. Que me estoy temiendo la gafada: que Croacia nos gane de chiripa en el último suspiro, Italia le vapulea 5-0 a Irlanda, y nos quedamos fuera de competición, con un disgusto que no nos recuperamos en un mes, hundidos y deprimidos completamente por la crisis económica, qué horror.

Acabo de terminar una grata conversación con Luís Echevarria, magnífico cantante y guitarrista que ya hemos visto antes tocando en nuestro local, y me ha confirmado que este viernes, día 22 junio a las nueve menos cuarto de la coche, tendremos sobre el escenario a BLUTARSKY, proyecto que Luís comparte con Juan Gumucio, excelente guitarrista. Ambos, con un invitado que hará de tercera guitarra y que está aún sin concretar del todo, repasarán en acústico grandes éxitos del rock clásico, con esos temas inmortales de la Credence, Rolling, Neil Young, The Band, James Taylor… Purito disfrute, no te lo pierdas. Te lo van a contar y sufrirás.

Y para terminar, casi aseguraros de que el viernes estará funcionado el air condition: se acabó el calorazo; pero, eso sí, que los artistas sigan sudando la gota gorda, que da su ambientillo, je, ja.

Nos vemos esta tarde-noche de lunes, entre amigos y disfrutando del fútbol; y si no, el viernes en el concierto. Y, por supuesto, seréis bienvenidos cuando queráis, que abrimos de 9 de la mañana a 11.30 de la noche todos los días laborales; tiempo hay de sobra,no os quejaréis.

Intentad ser felices, merece la pena.

Psicodelia en formato folk

Este pasado viernes disfrutamos de un brillante concierto de Peter Abels, con algunas versiones espectaculares, de las que destacaría tres: una canción de Syd Barrett, en la que le hizo el delicado y sentido coro una amiga que seguía el recital en primera fila; un temazo de Joni Mitchell y una de los Beatles. Armado solo con su guitarra y con una voz algo escasa de potencia pero muy bonita y con registros difíciles y variados, Peter Abels satisfizo a toda la concurrencia, causando incluso admiración en algunos lances vocales comprometidos resueltos con una diligencia sorprendente. No pude ver entera la actuación, otro evento me reclamaba fuera de La Estación, pero lo que caté me gustó mucho y me hizo salir con la sonrisa puesta para afrontar el resto de la noche. El repertorio, ya lo sabíamos, fue exquisito y careció de canciones obvias, lo que siempre se agradece. Las canciones las interpretó con gusto y sentimiento, aportando siempre algo propio el artista sobre el escenario, como debe ser. Disfrutamos (quienes lo vieron hasta el final me contaron que acabó aún mejor de lo comenzó) un show de calidad, distinto y muy sentido, en el que un cantautor talentoso demostró que la sicodelia y el encanto pop se llevan en el alma y se trasmiten sin necesidad de una banda ni de muchos instrumentos; sobre todo, si hay ganas de hacerlo bien y se cuenta con un público atento y participativo que disfruta con las canciones. Fue una manera de viajar a finales de los 60´s y primeros 70´s con espíritu de hoy, y sin abusar de la nostalgia, que es como mola hacerlo.

Para terminar, deciros que podéis ver todos los partidos de la Eurocopa en La Estación cómodamente y en gran pantalla, y que los de España tendrán sonido directo de la locución televisiva. Los demás partidos se verán sin sonido de la tele y con la música que pinchamos nosotros, que se disfruta más, ¿no os parece?

Os dejo con el cantante y actor norteamericano Jerry Reed, uno de los reyes del fingerpicking que falleció en 2008 a los 71 años en Nashville (Tennessee), haciendo un tema de aire country.

Mucha actividad en La Estación, ¿te la estás perdiendo?

Ayer, lunes, inauguramos la exposición fotográfica de Juan Boado, en la que destacaban las obras que ofrecían perspectivas imponentes de la torre Iberdrola, y otras con el tema central de la urbe bilbaína. Gran ambiente en la fiesta-lunch, con muchos jóvenes colegas y amigos del autor, circunstancia que aproveché para poner música un poco más moderna e indie de lo habitual. Menos folk, blues y country de lo normal, quiero decir. Pinché canciones de Tennis, Weekend, Ron Sexsmith, The National, Spoon, Arcade Fire, Tindersticks, Magnolia Electric Co., pero por supuesto cayeron otras de Smiths, Rolling, Jaywhaks, Cure, Beach Boys, Willie Wright, The Band, Eilen Jewell, Josh Rouse, Lucinda Williams…, una bonita sesión, creo; pero bueno, es lo que pude hacer en los escasos momentos en que los –afortunadamente- numerosos clientes no requerían de mi atención. Zampa atendía las mesas de los invitados y yo en la barra al público general. Fue una tarde-noche exigente para nosotros, pero muy animada para los asistentes: las caras de satisfacción eran muy numerosas , y nuestra Kronenbourg 1616 de caña se porta perfecta estos días, está buenísima, sabrosa, fresca y agradable. Se pasó bien, de veras. Si te lo perdiste, no será porque no avisamos, ¿eh?.

El pasado viernes tuvimos en concierto en nuestro local a Dead Bronco, que ofrecieron un set impecable, casi perfecto. Rebosante de actitud countryfolk un poco canalla, casi rockabilly en lo estético pero campestre y rudimentario en lo sonoro. Emitieron en mono, con un único altavoz, pero dentro su sencillez sonó superbien, potente y claro. Y la acústica del local, como es habitual, ayudó mucho. Siempre agrada a los artistas y al público, la música en directo suena muy bien en La Estación, que la noche del viernes acogió a una numerosa y entusiasta peña de seguidores del grupo, que aportaron juventud, estética punk-rockera, tatuajes bien hechos y buena marcha al ambiente. Tengo que reconocer que padecimos bastante calor en el interior del local, pero a la vez os informo que estamos dándole vueltas al asunto para resolver el problema, y que lo del aire acondicionado es cosa de pocos días.

Un poco más va a tardar el asunto de la ansiada terraza exterior,

Instalaremos la terraza cuando acabe la obra de reparación de la fachada del edificio y se retiren los andamios que estamos sufriendo desde el mismo mes de diciembre del año pasado cuando abrimos La Estación. Cruzo los dedos para que en julio finalice la obra y podamos ofreceros servicio de terraza, que, os adelanto, va a quedar muy chula y confortable, siempre respetando lo que diga la normativa municipal y atendiendo al bienestar de vecinos y viandantes.

Ah, y no os perdáis el concierto de PETER ABELS este próximo viernes.

Peter Abels es un experimentado cantautor de origen holandés y poderosa voz que se reconoce influido por Syd Barrett, Neil Young, Graham Nash, John Lennon.., y que hará, además de temas propios suyos, versiones de estos grandes iconos de la música popular. Una confidencia: le he pedido que toque varias del hace poco fallecido ex – Pink Floyd, artista genial, irrepetible e imperecedero mucho menos reconocido, en mi opinión, de lo que su obra merece. En particular, le he rogado encarecidamente que toque “Octopus”, publicada en un sencillo en 1969 y una de las dos primeras canciones publicadas por el autor en solitario. Es una de las canciones de Syd Barrett que más me gusta; la escuché por primera vez hace más de 30 años y aún me sé casi de memoria todos sus acordes. Psicodelia de primera, puro viaje interior; y pop de primera, por supuesto. Con lo que ha llovido desde 1969, con la eclosión de maravillosos cantautores que hemos disfrutado estos últimso años… y “Octopus” todavía parece música no ya de hoy, sino de mañana. Los genios, es lo que tienen.

Hasta la próxima, amigos.