Blutarsky: homenaje a Neil Young

IMPRESIONANTE CONCIERTO DE BLUTARSKY (en formación quinteto) EN LA ESTACIÓN.

SOLO FALTABA EL HOMENAJEADO: NEIL YOUNG.

La Estación de Neguri, 22 de diciembre

Y si llega a estar el genio canadiense, se sube al escenario, seguro, pero antes de tocar y cantar apostamos que lo que haría sería felicitar a Luís (voz, guitarra y armónica) Pit (guitarra, armónica, y voz), Juan (guitarra eléctrica, banjo y coros), Txomin (batería, coros) y Miguel (bajo) por el espléndido concierto que brindaron ayer a los clientes y amigos de La Estación, músicos de otras espléndidas bandas como Mcenroe, Fakeband o Zodiacs y a numerosos aficionados a este estilo -que ahora dan en llamar americana y que tanto nos gusta de siempre- que vinieron a comprobar si la expectación generada durante toda la semana por este monográfico Neil Young con 20 canciones del genio canadiense tenía razón de ser y se cumplían las expectativas. Lo estuvimos avisando todos los días, “no os perdáis el viernes el concierto, que va a ser muy especial”; hasta tal punto insistimos a todo quisque que se pasó por La Estación esos días que hasta que a eso de las siete comenzaron a ensayar no nos quitamos ese pelín de miedo a decepcionar que siempre te atenaza cuando has puesto muy pero que muy arriba la promesa.

Fue ver durante un cuarto de hora cómo hacían las pruebas de voz, cómo afinaban las guitarras y, en general, como sonaba la banda con el local casi vacío, y recuperar el aplomo y la tranquilidad: la convicción de que íbamos a presenciar un set maravilloso iba afianzándose.

Cualquier previsión, por optimista que fuera, quedó superada. El local se abarrotó, no cabía un alma por menuda que fuera, el sonido fue espectacular, nítido y potente, y por decirlo de algún modo, todos los músicos tuvieron su noche y dieron lo mejor de sí mismos. Y hablamos con conocimiento de causa, los hemos visto muchas veces en directo, pero nunca llegaron tan alto como ayer. Casi volaron, o mejor dico, nos hicieron volar a nosotros.

Fue un día muy especial, y no por prenavideño, sino porque se palpaba en el ambiente la casi ansiedad de todo el mundo de escuchar buena música live conforme iban BLUTARSKY ejecutando el impecable repertorio de NEIL YOUNG que habían preparado.

Cómo cantó LUÍS, con qué sentimiento y entonación, qué feliz se le veía pasando de canción, esforzándose por controlar la felicidad que sentía al verse rodeado de tanto talento y de tan buenos amigos en el escenario, un proyecto que él ha ido creando con el paso de del tiempo y que ayer dio muestras de las cotas de calidad que puede alcanzar y de las toneladas de emoción y de dicha que puede generar en el público que les escucha; cómo tocó la guitarra eléctrica JUAN Gumuzio, un auténtico monstruo con esos punteos, esos arpegios, esas emulaciones a la steel guitar, esas “cabalgadas” virtuosas, lo de este músico es de no creer, se atreve con el banjo y lo borda también, un lujo poder disfrutar de su música; y qué decir de PIT, parece que ha nacido para hacer música, todo lo hizo bien, es una máquina de precisión, no falla una nota, da gusto ver cómo disfruta en el escenario, le fluye la música con una naturalidad que da una envidia…, llevamos años viéndolo en conciertos, con Fakeband, en bolos rockeros y vintage en Jolaseta, en nuestro local formando parte de Blutarsky… y cada vez nos gusta más verlo subido al escenario y rockeando como lo hizo ayer, lo lleva tan dentro, se le ve tan dichoso rockeando…, si tuviéramos que destacar algo de su actuación ayer fue cómo cantó, sobre todo en el par de canciones en que lo hizo en solitario y relevando a Luís que, como es habitual, fue el cantante principal de la banda. Y qué decir de la rareza de la noche, ver al estupendo guitarrista y vocalista TXOmin aporreando la batería, y de qué manera, con qué ritmo y cadencia, siguiendo al discreto bajo de MIGUEL Guzmán que aportó cuerpo, profundidad, ritmo, jondura y presencia al sonido de una banda en estado de gracia.

No tenemos tiempo para más, contad vosotros vuestras impresiones si queréis, que con facebook es sencillísimo, le dáis a “comentar, escribís algo sobre el concierto, y ya está. No os cortéis, que estamos entre amigos.

Para terminar, por subrayar algo, contaros que ayer disfrutamos de momentos mágicos, de piel de gallina, pero destaquemos tres:

1) “After the gold rush”, qué decir. Juan sacando perfectamente las notas del piano origianal de este inmortal tema (¿la más hermosa canción de la historia?) con la guitarra, Pit a la armónica y segunda guitarra y la banda acompañando suavemente a un Luís que más que clavar al canción la hizo suya y nos la regaló envuelta en rosas perfumadas a todos nosotros. Momentazo.

2) Ya al final del show, invitó Luís al escenario a Dani Cabanela, líder de Still River, a cantar “Down By The River” y nada más ponerse al micro nos dejó helados y en pleno subidón emocional con el timbre de su voz (muy parecido al de Neil Young) y con el modo en que hizo este temazo, con la banda sonando muy conjuntada y rockera, con ¡cinco voces! perfectamente conjuntadas, una cancionaca que forma parte de lo mejor de nuestras vidas, quizá porque además de ser estupenda, nos inocula optimismo y fuerza, ¿no?

3) Iba transcurriendo el concierto, creciendo canción a canción, hasta que en un momento dado, dice Luís “vamos a hacer una canción tradicional canadiense no tan conocida como otras del repertorio de Neil Young y se la vamos a dedicar a Pablo y a Juan”… ¿cuál sería? Pues fue esta cuyo video os dejamos abajo (en su versión original, que es como más nos gusta) y que quizá fue la que mejor tocaron de todas, y mira que ya es decir. (nos dice Luís esta mañana por el guasap que «es la que gusta particularmente a los románticos»; pues vale, lo seremos, no pasa nada.

Y vamos corriendo para La Estación que ayer nos quedamos casi sin existencias. Gracias, BLUTARSKY, que cada día que tocan se ganan la categoría de “banda residente” de nuestro local y que ayer ofrecieron la primera entrega de la serie LA PROPUESTA, de la que venimos hablando hace ya varios meses. La próxima va ser un monográfico de VAN MORRISON. Nos consta que andan Blutarsky un poco agobiadillos por las dificultades técnicas (ya tienen un saxofonista, por ejemplo, pero habrá que llevar también teclas, en fin…) que supone el reto, pero nos encanta pensar en cómo ensayan, en cómo resuelven los problemillas que presenta cada canción, en fin, a ver si le ponemos fecha ya al evento, por nosotros, cuanto antes, faltaba más.

Un aficionado bilbaíno, Joserra Rodrigo, al parecer fan de Neil Young y de The Band (proyecto en que militan Pit y Txomin, y que se salieron un concierto conmemorativo del mítico “The Last Waltz” el pasado viernes en el Antzoki) ha colgado en su canal de youtube un video de este concierto de Blutarsky en La Estación. Y queremos ponerlo aquí, para que lo veamos todos, dando las gracias a este hombre, que tiene un blog muy interesante, Rockanrodri Land. Gracias, amigo. 

He aquí el video, con la impagable “Tell Me Why the same”, en la que Pit se salió, cantando y tocando, y Juan Gumuzio a la guitarra, y en fin…, todos los componentes de Blutarsky, que nos hicieron muy felices esa tarde/noche. ¡Qué día, amigos y amigas! Hay que repetir, claro que sí.  
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Fantástico concierto el que ofreció ayer (7 diciembre 2012) La Mara en La Estación,

Acompañada del maestro Pepe Heredia y de un percusionista al cajón y los timbales, más dos chicas a las palmas. Un ambiente impecable, el local lleno hasta la bandera y un único pero: que, al menos en las canciones más suaves y lentas -que son las que más atención y silencio exigen-, haya clientes y amigos de La Estación que no pueden dejar de hablar alto y que (queremos pensar) no reparan en que el concierto dura poco tiempo (es solo una hora a la semana) y que, por respeto a los artistas y al público interesado en escucharles, podrían hablar bajito o retirarse un poco de la zona en que se sitúa la gente que quiere escuchar el recital. Que, en este caso, y por voluntad de los artistas, sonaba a bajo volumen, sin apenas amplificación y solo con instrumentos acústicos. A ver si logramos que esto se solucione un poco, sin que nadie se moleste. En el video que os ponemos se puede comprobar cuánto de molestas resultan esas voces del público charlatán. ¡Si hasta la propia Mara tuvo que pedir silencio en varias ocasiones! Nos daba un poco de vergüenza, pero…
Hizo La Mara versiones muy personales y de gran calidad de clásicos como “A mi manera” o Noches de bohemia”, y también de canciones más recientes y aflamencadas como “Sobreviviré” o “Arráncame”, además de algún fandango, un par de sevillanas y otro de rumbas. Aunque todo el espectáculo rayó a gran altura y la impecable voz de La Mara funciona en cualesquiera tonos y estilos, de puro bella, nítida y potente que es (ya nos lo había comentado Pepe Heredia: “voz limpia, cálida y natural; ha pillado el duende”, nos dijo en la entrevista que publicamos aquí mismo ayer), nos quedamos con las canciones más lentas y románticas, que las borda esta pedazo de artista, hasta el punto de que vimos más de una lágrima de emoción que no podía contenerse en el rostro de varios amigos y amigas, y nos incluímos absolutamente. Porque no solo canta bien esta joven mujer que brilla en todos los palos del flamenco que abordó, sino que trasmite toneladas de intensa emoción cuando canta e irradia una simpatía y naturalidad de enamorar, además de comportarse en todo momento como una artista hecha y derecha en el escenario. Le auguramos un bonito futuro en la música, aunque no le dijimos nada de presentarse a uno de esos concursos televisivos que tan poco nos gustan. Eso sí, si participara, gana o queda muy bien, eso seguro. Porque lo tiene todo: talento y duende flamenco, belleza, juventud, encanto natural… La Mara en la vida civil se llama Ainara, y es de Leioa, aunque a todos se nos antojó anoche difícil de creer viéndola y escuchándola, tan profunda e inconfundible es la identidad flamenca que emite desde el escenario. Sobre todo en las distancias cortas, como en el recital de ayer, que la teníamos a un metro escaso de nosotros. Así, viendo cada gesto de los artistas y con el sonido penetrando hasta lo más profundo de nuestro interior, la música es otra cosa, remueve más cosas dentro de nosotros. O así nos lo parece a algunos. Le propusimos que dentro de un tiempo nos vuelva a visitar, más que nada para que quienes no pudisteis verla ayer podáis disfrutar de su arte. Y del de los dos músicos que la acompañan, sobre todo el maestro Pepe Heredia, que dio una auténtica clase de toque de guitarra, con la discreción, jondura y precisión de los grandes músicos.

Veámoslos a todos ellos, y comprobemos si lo que decimos de la impresionante voz de La Mara es cierto o exageramos un poco. Se admiten comentarios.