Tentadora cita la de mañana, miércoles: la cantautora indie-folk-rock MAIKA MAKOSVSKY (mallorquina, pero de madre andaluza y padre macedonio), toca en Bilbao presentando su nuevo y estupendo disco, más virado al neo-folk que su anterior obra.
Nos resulta un poco cara la cuestión (25 euros) para lo que acostumbramos y para el tipo de artista de que se trata, pero hay dos argumentos que hacen razonable el desembolso:
1) el concierto es en el Teatro Arriaga, y eso se paga, y la calidad del sonido está casi garantizada
2) MAIKA MAKOSVSKY tocará su guitarra y cantará muy bien acompañada: Quartet Brossa de cuerda + Pau Valls a la trompa + Pep Mula en la batería. Sonidos acústicos de mini-orquesta de cámara + folk raruno de amplio espectro (referencia blues, ambient, experimental…) y de querencia un poco minimal + voz preciosa + buenas canciones… ejem, interesante, ¿no? Casi que apasionante, diríamos.
Hay que pensárselo muy seriamente. Porque el asunto puede ser tal que así: