Últimas publicaciones de interesantes bandas y artistas.

Hoy seremos (un poco más) breves, solo informaremos de que han publicado recientemente disco nuevo (los hemos catado todos, y ninguno baja del notable) bandas y artistas tan interesantes como:

ANDREW BIRD, “Are you serious?”. Folk-pop de cantautor indie. Peculiar cantante, toca varios instrumentos, aunque destaca por el uso recurrente del violín, y silba extraordinariamente bien. Muy reconocido desde hace casi dos décadas, el bueno de Andrew nos entrega en su ya su décimoprimer disco canciones tan buenas y sensuales como en él es habitual, quizá un poco más arregladas en estudio, más sencillitas en lo melódico y más animadas de lo habitual, influídas probablemente por unas letras enfocadas en la nueva vida, más seria y tal, de Bird como hombre casado y padre de familia. Pintaza que tiene.

CHARLES BRADLEY, “Changes”. R&b-soul-funk intenso en plan James Brown, de un hombre analfabeto que vivía en la calle haciendo versiones de su maestro, y que ya casi ha alcanzado el rol de soul-star. No supera a sus dos (y únicos) anteriores discos, el primero de ellos publicado hace solo cinco años pese a que Charles Bardley tiene ya más de 60, pero “Changes”, entre el lamento y el baile, funciona estupendamente: alma y poderío, soulpower.

EMITT RHODES, “Rainbow Ends”. Pop-rock de autor, veterano músico californiano de culto, Rhodes rozó el éxito en los 70, acaba de reaparecer y siempre ha sido comparado con Paul McCartney. Unas canciones impresionantes y un sonido atemporal y seductor, así de simple y de redonda es la cosita. Nuestro amigo Edu Ranedo comentaba hace pocas semanas en la edición digital de El País: “Rhodes no ha perdido su magia. Su pop aparentemente sencillo pero de construcción elaborada, lleno de intrincados detalles, sigue tal cual. Sus letras mantienen el tono de cierta desesperanza que siempre fueron marca de la casa, hoy actualizada por la previsible retahíla de rupturas, divorcios, soledades y achaques de la edad. Pero, como entonces, el envoltorio suaviza los mensajes y abre la puerta a la esperanza”. (…) “De puro clásico en formas y respetuoso con las hechuras tradicionales, se percibe tan alejado a lo habitual en estos tiempos que hasta resulta enternecedor. Pero no hay nostalgia aquí, ni un gramo, solo un artista con poso y en forma del que desafortunadamente nos hemos visto privados durante demasiado tiempo”. Apetece escuchar este disco, ¿no?

MOGWAI, “Atomic”. Nueva obra magna de este colectivo escocés -no hay líderes visibles- muy apreciado por todo el mundo, nunca han tenido pretensiones de fama ni se han considerado estrellas a pesar de haberlo sido casi desde sus inicios en los 90; icono genuino del post-rock indie desde hace más de quince años, cada vez más sedosos, instrumentales e hipnóticos, hemos perdido la cuenta de las veces que les hemos visto/disfrutado en concierto; y nunca nos hemos cansado de ellos.

RICHMOND FONTAINE, “You Can’t Go Back If There’s Nothing To Go Back To”. Esta banda es el proyecto de un poeta en su traslación a la música, hablamos del cuarentón, un poco sosote y buen vocalista Willy Vlautin, que se recrea, ahora y siempre, en un hermoso paisajismo sonoro a ubicar entre el country alternativo y el pop de cámara, y unas letras que hablan de la otra América, como decíamos antes: “No es un disco para el viernes por la noche o para poner a tu chica para impresionar. Compongo canciones oscuras”, dijo Vlautin de su anterior disco, y nosotros lo hacemos extensivo a este último, que se nos antoja un poco menos dormidera que otros de la banda. Que ojo, siempre suena bien y mola bastante. Americana de autor, baladitas dolientes pero sin drama, y bellas como ellas solas.

ANNA MEREDITH, “Varmints”. Original pop electrónico, entre la vanguardia y lo comercial, creado por una joven escocesa a la que restan pocos años para dejar de serlo. Minimalismo, tendencia a lo experimental asumiendo riesgos, canciones intensas y repetitivas como en cascada; es pop de vanguardia, pero también dance introspectivo, y recuerda a ciertas bandas sonoras, nos retrotrae al techno sinfónico/progresivo y parece nacido de quien ha escuchado buena music culta contemporánea. Rara y atractiva combinación, en todo caso, que no cae en la extravagancia ni en lo inaudible y se deja disfrutar perfectamente. Un buen descubrimiento de este año.

Venga, feliz martes. Os dejamos con “Left Handed Kisses”, canción del nuevo disco de ANDREW BIRD, en la que Andrew cuenta con la colaboración de la gran Fiona Apple, en uno de los más lucidos momentos del nuevo disco de ANDREW BIRD, que podría convertirse en uno de los más logrados de su muy meritoria discografía.