Descubrimiento de banda con chica: los neoyorkinos BIG THIEF.

MARTES, EL ÚLTIMO DE MAYO.

Nuevo descubrimiento de banda con chica: los neoyorkinos BIG THIEF.

Hermosa juventud.

Nunca prestamos atención a la music que emocionaba a nuestros padres; la veíamos como de otro planeta, de una época superada que frenaba la llegada de lo nuevo, de la libertad, de la excitación, de la emoción…, tan lejana y anacrónica nos sonaba; pero tan cierto como ello es que jamás pensamos en disfrutar tanto, muchas décadas después, con la que hacen quienes podrían ser nuestros hijos; y, atentos, que en breve tendremos que decir nietos.
No importa, seguimos en la brecha. La mayor parte de los prejuicios (no todos, ¿qué, sino la suma de ellos, es la buena tradición, la imprescindible educación/urbanidad y, en general, la cultura?) son un freno para la vida feliz, la convivencia y el disfrute. En la music, seguro, mejor sin prejuicios. Y es más, atendiendo, en la music y no solo en ella, a lo que hacen los jóvenes, como lo hicimos cuando nosotros también lo éramos.
Hermosa juventud, decíamos, como la del novísimo valor del indie-rock estadounidense, Adrianne Lenker, creadora y líder del cuarteto de Brooklyn BIG THIEF, que con su álbum de debut, «Masterpiece» (salió al mercado nortemaericano el pasado 27 de mayo) han seducido a la crítica de su pais. Aquí aún casi nadie habla de BIG THIEF, pero no tardará en estar la banda en boca de casi todos. Con canciones como esta que da título al disco, no hay duda. Indie-rock enérgico y emocionante con alma songwritter y cierto poso folk, o sea, de lo que más nos viene gustando desde hace años. Podríamos situar a la banda de Adrianne Lenker -y a ella, más en concreto-, entre nuestras adoradas Sharon Van Etten (cuando se pone melódica y reduce el misterio, Courtney Barnett (cuando tira menos al punk y al country para arrimarse al rock) y la Pj Harvey de sus principìos de diva del indie-rock corajudo.
Ponemos la canción que da título al disco, que es de las más inmediatas y sencillas de escuchar de este disco, pero «Masterpiece» tiene joyitas más complejas (como la estupenda «Real Love»), de aire algo más folk, asumiendo cierto riesgo y sonando menos asequibles, que es casi lo mismo que decir tan buenas o mejores. Pero escuchemos este temazo, guitarrero y rockero, extrovertido y animado, que nos va a alegrar la mañana, que viene sosita y desapacible.