Muere Peter Seeger

Esta semana vio morir, casi centenario, a PETE SEEGER, leyenda del folk norteamericano y activista de izquierdas comprometido tanto con los anhelos de la clase trabajadora como la recuperación de olvidadas canciones la tradición popular musical de EEUU. Unos le recordarán porque sentó las bases de cómo se toca el banjo, otros porque definió los rasgos pertinentes de lo que durante décadas se ha considerado «cantautor protesta», algunos por las reivindicativas letras de sus canciones en una época en las que en nuestro país constituían una provocación en toda regla para el orden establecido, o por lo que significaron su posicionamiento y canciones en momentos históricos de su país como la guerra de Vietnam; otros, por su militancia en el partido comunista de EEUU, en el que solicitó la baja al conocerse los crímenes de Stalin; o por su disco , ‘Songs of the Lincoln Battalion’ en memoria de la brigada norteamericana que participó en la Guerra Civil española; otros porque su legado artístico y su figura son tan grandes que se compara con la del seminal Woody Guthrie.

En la memoria de otros, PETE SEGER figurará por su imperecedera rebeldía y espontaneidad, su militante negativa a incorporarse al star system y a lo que le rodea, y por permanecer siempre al lado de los trabajadores y llevar una vida sencilla y sin oropeles. Aunque quizá los más, lo recordarán por la influencia que su figura ejerció, tanto en lo personal como en lo artístico, en mitos de la música norteamericana de alcance planetario como Dylan o Springsteen. El propio Bruce, en el concierto/fiesta del 90 cumpleaños de este icono de la música folk celebrada en el Madison Square Garden, lo presentó como «un archivo vivo de la música americana y de su conciencia, un testamento del poder de la canción y la cultura».

Pues eso, descanse en paz PETE SEEGER. Siempre nos cayó bien Seeger, la verdad, aunque sus canciones quizá llegaron más a la generación anterior a la nuestra.