Hemos podido apreciar, asombrados, la espectacularidad, la gran calidad y las llamativas dimensiones de las fotografías, toda de personajes relacionados con la música. Las seis fotos de que consta la exposición tiene como rasgo diferencial: que están hechas para ser tocadas, ya que tienen relieve y pueden así ser disfrutadas por invidentes o cualquier persona con deficiencia visual severa.