Comentarios de un 30 de marzo

(Nada, que empezamos felices saludando el estupendo día que hace, celebrando que brilla el sol, proponiéndonos las mejores intenciones para este miercoles, eligiendo un vídeo (M. WARD, en impecable directo en pequeño formato) con suficiente ornato, y terminamos hablando de política, o casi. Buen día, amigos/as.)

MIÉRCOLES DE LA SANTA SEMANA, y último de marzo.
Delicioso y soleado día primaveral que merece ser saludado con sonrisa venturosa y celebrado con la mejor de nuestras disposiciones .

Puede ser una bonita jornada. Vamos a intentarlo, que el finde aún lo vemos lejos (porcier: el viernes, 1 abril, concierto en La Estación de Neguri, avisado/a quedas), que mañana vuelve la lluvia y que hoy, lo mismo (va a ser que no) tenemos el embrión de un nuevo Gobierno que nos ahorre unas nuevas ELECCIONES.

Cita repetida con las urnas que además de inútil, carisísima e inoportuna, muestra en obscena representación escénica uno de los peores registros de la penosa clase política que maldirige una nada despreciable parte de nuestras vidas. Nos referimos a ese ensimismamiento estúpido de los líderes y partidos que conduce a la parálisis y la repetición de las situaciones; y a la irresponsabilidad ante los problemas del país, a la soberbia de los interlocutores y la incapacidad de hablar respetuosa y productivamente con el rival, que impide y lastra las imprescindibles conversaciones para salir de este atolladero. Crucemos los dedos. Pero, y no es por enredar, siempre queda la pregunta: ¿es realmente mejor un mal acuerdo que ningún acuerdo; es decir, que repetir las elecciones? Quién lo sabe. Es casi lo único que nos gusta de la política, que es como la vida, un auténtico lío. Una vez más, nos hemos puesto estupendos. Llevamos un (pésimo) editorialista dentro, qué le vamos a hacer.

Nuestra modesta aportación a este precioso día: un video maravilloso y reciente (lleva publicado menos de un mes) de un concierto en pequeño formato de uno de nuestros cantautores folk- rock favoritos desde hace años, el californiano M. WARD, que cada vez nos recuerda más a quien fuera uno de sus descubridores y maestro, el legendario y aún muy activo Howe Gelb, sí, el líder de Giant Sand, normbre tan mítico como el del propio Gelb.

M. WARD acaba de publicar nuevo disco, y para variar, sigue con su sonido vintage 50s, y es muy recomendable.

Venga, vamos a disfrutar con este breve set (no llega a los 20 minutos) de M. WARD; lo hace todo bien el hombre. Ante todo, es un excelente guitarrista y notable compositor, así nos parece.